El caso del bebé Messiah Bey
Entrevista de Revista étnica en colaboración con el podcast Teta y Pecho sobre este caso.
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Messiah Bey es un niño evidentemente negro, quien fuera removido el 4 de marzo de este año por el Departamento de la Familia (DF), de un núcleo familiar compuesto por una madre y un padre afroamericano. Según la oficina del Programa de Ayuda Suplementaria (WIC) de San Juan luego de una segunda visita de los padres con Messiah, el menor estaba bajo peso y el caso es referido al DF.
El día que Messiah fue separado de su familia, y a diferencia de casos similares, hubo intervención del SWAT sin personal del DF que hablaran inglés. “He trabajado con casos similares y ninguno ha sido manejado de la manera en que se hizo con este”, explicó en entrevista Lourdes Santaballa, activista y consultora en lactancia. “He visto un trato diferente para manejar estos casos de acuerdo con la familia y la procedencia. Es evidente que la familia experimentó racismo institucional”
Todo comenzó cuando los padres, luego de visitar las oficinas del WIC, fueron notificados por quien los atendió que debían llevar a Messiah a sala de emergencia por que estaba una libra y media (1.5 lb) bajo peso. Solicitaron información y referido a un pediatra ya que no querían exponer al bebé a una sala de emergencia cuando se hablaba de que este lugar era foco de contaminación del COVID19, pero se les negó.
Santaballa, quien tuvo la oportunidad de asistir a la madre, indicó que el menor nació a las 37 semanas con un peso de 5.2 lbs y había bajado de peso, a 4.6 lbs, al momento de ser dado de alta. “El primer fallo fue del hospital al dar de alta a un bebé bajo peso” aclaró. “Tenemos la limitación del idioma. El personal que la atendió no sabía (hablar) inglés y no les dieron las directrices de ir a un pediatra, por esta razón ella no visitó un médico”.
También mencionó que al momento de la visita al WIC, Messiah había aumentado de peso, 7.2 lbs, que aún estando debajo del peso requerido, se notaba una mejoría. “La lactancia junto con alimentación suplementaria pudo haber ayudado a Messiah sin necesidad de utilizar fórmula”, explicó. “Ahora que está bajo custodia del DF, no ha recibido atención médica y está siendo alimentado con fórmula”.
La activista, quien conoce a los padres a través de un referido por otra colega especialista en lactancia, mencionó que el interés de la madre era iniciar una relactancia y poder dar de su leche materna a su bebé, pero en ese momento ya el menor estaba bajo custodia del DF. “El Departamento de la Familia nunca recibió la leche por que, según la agencia, no existía un protocolo para gestionar este procedimiento durante el COVOD19.” Es importante señalar que ambos padres practican una dieta vegetariana.
“Tenemos un bebé que era alimentado de manera natural y que ahora usa una mamadera plástica”, explica. “La lactancia es una conversación entre mamá y bebé. Esta remoción abrupta, además de provocar traumas en el desarrollo cerebral del bebé, pudo haber desarrollado en la madre una mastitis (inflamación en el tejido del seno)”.
Santaballa instó a tener la conversación del racismo institucional en la agencias y a la colaboración de activistas antirracistas para evitar que casos como este se repitan.
Cabe señalar que, luego de la remoción de Messiah, le tomó al Tribunal de Menores tres meses y la cancelación de varias vistas para atender el caso. Actualmente, aún la madre y el padre no ha podido tener contacto con el menor, solo a través de videollamada y están en espera de una nueva vista y por el procedimiento judicial tratarse de un menor están bajo una ley de mordaza.
Según declaraciones de la administradora del Departamento de la Familia (ADFAN) Glenda Gerena, desde su llegada a la isla, esta familia ha recibido todas las asistencias solicitadas, incluyendo asistencia alimentaria del programa PAN, el programa WIC, Servicios Legales, Departamento de la Vivienda para obtener un hogar, entre otras.
Declaración completa del Departamento de la Familia sobre este caso: