Continúa la violencia racial sin acción de Justicia para Familia de Canóvanas
Líderes antirracistas se manifestaron frente al tribunal de Carolina.
por Lumarhi J. Rivera
“¿Dónde están los antirracistas? ¡Aquí están los antirracistas! ¿Dónde están los antirracistas? ¡Aquí están los antirracistas!”, era una de las consignas que resonaron frente al tribunal de Carolina.
Durante la mañana del 24 de enero de 2023 en el Centro Judicial de Carolina se efectuó la vista preliminar del caso criminal contra Luis Espinet, quien amenazó de muerte a Chanelly Cortés. Mientras tanto, a las afueras del tribunal varios vecines de Haciendas de Canóvanas y otras personas se manifestaron en solidaridad por el acoso racista que vive la familia de Chanelly y su esposo Luis Ramírez.
Las Barrileras del 8M se unieron a la manifestación con la voz de Sheizel García y Marien Torres en el barril.
En el 2020 la familia Ramírez Cortés radicó un caso civil a su vecina Carmen García por acosarlos continuamente a elles y sus hijas con ruidos excesivos, insultos y letreros racista. La radicación del cargo criminal surgió luego de que Espinet, hijo de García, amenazó con un arma de fuego a Cortés.
Los acosos de la familia Espinet García escalaron con la colocación de cámaras de seguridad hacia las habitaciones de la familia Ramírez Cortés y la contratación de seguridad con armas largas en manifestaciones de solidaridad de líderes antirracistas.
Tanto vecinos como ciudadanos de otras comunidades clamaron por paz para la familia Ramírez Cortés.
Algunes vecines llegaron al tribunal para apoyar a la familia Ramírez Cortés y para denunciar la conducta de los Espinet García como una amenaza a la paz de la comunidad. Así lo confirmó Claribel González, residente de Haciendas de Canóvanas por 25 años.
“Todos en la comunidad estamos en riesgo. La señora y su hijo han sido abusivos”, expresó indignada la vecina del matrimonio.
González relató al equipo de Revista étnica que los ruidos excesivos y el conflicto de las armas inquieta a los residentes de Haciendas de Canóvanas. “Queremos paz, ¡paz!”, añadió.
La Colectiva Feminista en Construcción se presentó en solidaridad a la familia Ramirez Cortés.
En reacción a las expresiones de esta vecina, la portavoz de la Colectiva Feminista en Construcción, Zoán Dávila, señaló que este conflicto civil y criminal tomó una mayor magnitud y afecta desde las menores de la familia Ramírez Cortés, hasta les vecines de la comunidad.
Además, Dávila denunció la ineficiencia del Estado para proteger a la familia Ramírez Cortés del acoso racista.
“El hecho de que este patrón lleve 3 años tiene que ver con que el Estado, el Sistema de Justicia y las agencias de gobierno no están preparadas para ver atender estos casos y ver la violencia racista como una que se tiene que eliminar de la sociedad” explicó Dávila al equipo de Revista étnica. “Las leyes en Puerto Rico están construidas para operar desde la violencia racista y ejercerla”, añadió.
La familia Ramírez Cortés enfrenta dos procesos judiciales contra la familia Espinet García, el caso civil y el caso criminal.
Por otro lado, Chanelly Cortés expresó su frustración ante el nivel de peligro al que escaló la violencia de la familia Espinet García y la dilatación del proceso judicial.
“Nosotros sentimos que [el Estado] mantiene que esto no se trata de un conflicto racial sino de un conflicto vecinal, y no es así”, aclaró Cortés. “A raíz del conflicto racial es que se crea el conflicto vecinal”, añadió.
Por otro lado, su esposo Luis Ramírez hizo un llamado al gobierno para fortalecer los procesos legales que atienden a víctimas de racismo en Puerto Rico.
“La legislatura tiene que ponerse a trabajar también. El racismo está aquí, es evidente” enunció Ramirez.
La próxima vista del caso criminal está pautada para el 1 de marzo, mientras que la vista del caso civil se efectuará el 22 de febrero.
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Compartimos un resumen realizado por el equipo de redacción de Revista étnica
¿Justicia, Seguridad y Protección para quién? Caso Familia de Canóvanas